martes, 4 de agosto de 2015

Vitamina C

Sin duda, este año ha sido naranja:



Primero llegó la edición de este año de la pluma Lamy al star: copper orange.  La foto no le hace justicia y es un color  muy atractivo, vibrante. Estas plumas me encantan. Lo mismo que sus primas las Lamy Safari en plástico no me dicen absolutamente nada, estas en aluminio me chiflan. A mucha gente no les gustan porque las encuentran toscas e incómodas. Para mí es todo lo contrario. Se adaptan perfectamente a mi mano y el plumín se puede intercambiar de la manera más fácil: simplemente sujetando entre los dedos y tirando un poquito hacia fuera. Si la pluma está entintada, lo mejor es poner el plumín boca abajo, y tirar con un poco de papel de cocina. Con la misma pluma podemos tener el plumín que nos apetezca según la tinta con la que se quiera escribir.

Esta pluma, con convertidor incluido y gastos de envío no sale por más de 25€. Son prácticas, bonitas y a pesar del trote que llevan, ninguna se ha rayado todavía. Aún es pronto, pero me gustaría saber qué color será el de la edición del próximo año: ¿rosa? ¿violeta? ¿blanco?

El otro día me dijeron que era una persona "vintage". Me gustan los relojes, ahora que nadie los lleva porque con los móviles la gente los ha aparcado. Y me gustan las plumas, que todo el mundo prefiere los rollers o los bolis de gel. Vamos, que me han llamado "viejuna" sin miramientos. Como se suele decir, cada loco con su tema.

sábado, 1 de agosto de 2015

Inspección postal

Después de estar cuatro meses fuera de casa, por curioso que parezca, me apetecía muchísimo volver a escribir con mis plumas. Sólo me había llevado una Pilot1, una pluma chiquitita que se vino en un bolsillo interior del bolso. No quise arriesgarme a facturarlas y que se perdiera la maleta o algo parecido. 

Me estoy tomando las cosas con calma y no las estoy entintando todas, como me ocurría antes. También es cierto que escribía un poquito con todas cada día, pero voy poco a poco. No hay necesidad. 

Tenía ganas de un buen papel, así que le pregunté a Pepe, de Inktraveler. En la ultima quedada en que nos vimos, había traído un block con un papel de muy buena calidad, y ahora lo tiene en tamaño A5, que es el que más me gusta. Pues ayer llegó un mensaje con varias cosas:



Menos el Midori travel, que también se vino conmigo de viaje, todo lo demás es lo que he recibido. El cuaderno Life Noble note es rayado, en color crema y muy suave. Me gusta aún más que el Midori notebook. Me da la sensación de que la pluma se desliza mejor y el trazo es una delicia. 




La tinta es Sailor Sôten (o Souten), un azul precioso que tiende al turquesa. Tengo plumas que cuando se termina la tinta, siempre voy variando y pongo una distinta cada vez. Y otras plumas que siempre llevan la misma tinta. En este caso, la Sôten es la suya. Le va perfecta, me gusta muchísimo la combinación. 



Aquí me verifican cada uno de los paquetes y me dan el visto bueno para ir abriendo. Se lleva como comisión la cuerda de cada uno. Me parece un trato justo.

El otro cuaderno es más finito, cuadriculado esta vez. Es un Tsubame. Pondré fotos cuando lo estrene, pero con calma. Hay que disfrutar cada cosa a su tiempo.  !A disfrutar del mes de agosto!